La doctora Ericka Escalante indica que el estilo de vida actual produce mucho estrés y ansiedad en las personas lo cual influye de manera gradual en los hábitos alimenticios de las personas y que derivan en sobre peso y obesidad.
Tanto la ansiedad como la depresión están presentes en personas con obesidad las cuales son exasperados por el estilo de vida que se lleva hoy en día así como el entorno en el cual abunda la comida con un bajo contenido nutrimental afirmó la especialista.
La bioquímica cerebral juega un papel junto con los neurotransmisores en el desarrollo de la obesidad respecto a la gratificación en el cerebro que produce a la hora de comer ciertos tipos de alimentos.
La especialista destaca que uno de los neurotransmisores más importantes que tiene que ver con esta correlación es la serotonina, sustancia producida por el hipotálamo ya que inhibe el apetito y aparece en niveles anormales en personas con depresión.
Un estudio realizado en la Universidad de San Francisco en el año 2008 dice que la serotonina puede intervenir en la acumulación de grasa, por lo que es posible que en un déficit de ésta genere problemas de peso.
Es por eso que el tratamiento que deben de recibir las personas con obesidad debe de ser muy completo en el cual incluyan, nutriólogos y psicólogos ya que, no todo está en lo que se come y en el ejercicio si no que las emociones juegan un papel muy importante. (Fuente, Universidad Iberoamericana)