Nick Obradovich, investigador del Laboratorio de Medios del Instituto de Tecnología de Massachusetts, descubrió que el cambio climático afecta la salud mental de las personas. En el estudio se halló un impacto a gran escala de la temperatura sobre el comportamiento humano.
Asimismo, el bienestar de las personas demuestra expresiones emocionales alteradas por el clima. Un ejemplo de afectaciones es cuando interfiere en la calidad del sueño debido a la temperatura inusualmente cálida o fría.
La cantidad de actividad física también se ve alterada por el tipo de clima que prevalezca. Incluso, se ha descubierto que el cambio climático influye en los factores de estrés ambiental, modificando conductas sociales.
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Durante la investigación se encontró que las temperaturas extremas tanto calientes como frías, alteran los sentimientos expresados por las personas. Es entonces que estos efectos se pueden acumular empeorando la salud mental.
En este sentido, se descubrió que las altas temperaturas también son capaces de incidir en el aumento de las tasas de suicidio. De ahí la afirmación de que la temperatura puede intervenir tanto en sentimientos regulares como en estados extremos de salud mental.
Los resultados se identificaron mediante un análisis de datos meteorológicos públicos junto con informes de salud mental del Programa de Vigilancia de Factores de Riesgo de Comportamiento (BRFSS) del Centro para el Control de Enfermedades.
Al respecto, encontraron que las altas temperaturas mensuales aumentan la probabilidad de experimentar síntomas de mala salud mental. Además determinaron que el calentamiento a largo plazo y el aumento a largo plazo de los casos de salud mental, están directamente relacionados.
También identificaron que una zona expuesta al huracán Katrina estuvo asociada con aumentos posteriores en la prevalencia de problemas de salud mental.
No obstante, los investigadores reconocieron la imposibilidad de examinar los efectos a largo plazo de estos problemas en la salud mental.
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El cambio climático representa una gran amenaza para el bienestar humano en general. Desde las emociones diarias hasta los problemas de salud leves a moderados y sus consecuencias extremas.
Fueron estudiados alrededor de 2 millones de personas entre 2002 y 2012. Se encontró que el cambio de temperatura mensual entre 25°C y 30°C aumenta los problemas de salud mental en 0.5%.
El aumento de 1°C en el calentamiento de 5 años se asocia con el incremento de 2% en la presencia de dificultades en la salud mental.
Sin embargo, muchas personas con síntomas de trastornos mentales no buscan tratamiento o no necesariamente cumplen con los criterios de un diagnóstico clínico.
Los factores ambientales dañan la calidad de vida en diversas áreas de riesgo social. Una mala salud mental produce costos sociales que necesitan mejorar la calidad de atención de salud mental.
De esta manera se aumenta la capacidad de recuperación, especialmente para aquellos que son más vulnerables a los impactos del cambio climático.
Asimismo, el bienestar de las personas demuestra expresiones emocionales alteradas por el clima. Un ejemplo de afectaciones es cuando interfiere en la calidad del sueño debido a la temperatura inusualmente cálida o fría.
La cantidad de actividad física también se ve alterada por el tipo de clima que prevalezca. Incluso, se ha descubierto que el cambio climático influye en los factores de estrés ambiental, modificando conductas sociales.
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Cómo afecta el cambio climático a la salud mental
Durante la investigación se encontró que las temperaturas extremas tanto calientes como frías, alteran los sentimientos expresados por las personas. Es entonces que estos efectos se pueden acumular empeorando la salud mental.
En este sentido, se descubrió que las altas temperaturas también son capaces de incidir en el aumento de las tasas de suicidio. De ahí la afirmación de que la temperatura puede intervenir tanto en sentimientos regulares como en estados extremos de salud mental.
Los resultados se identificaron mediante un análisis de datos meteorológicos públicos junto con informes de salud mental del Programa de Vigilancia de Factores de Riesgo de Comportamiento (BRFSS) del Centro para el Control de Enfermedades.
Al respecto, encontraron que las altas temperaturas mensuales aumentan la probabilidad de experimentar síntomas de mala salud mental. Además determinaron que el calentamiento a largo plazo y el aumento a largo plazo de los casos de salud mental, están directamente relacionados.
También identificaron que una zona expuesta al huracán Katrina estuvo asociada con aumentos posteriores en la prevalencia de problemas de salud mental.
No obstante, los investigadores reconocieron la imposibilidad de examinar los efectos a largo plazo de estos problemas en la salud mental.
Conoce más sobre: Adicción al celular podría ser trastorno compulsivo
Amenaza para las emociones y conductas sociales
El cambio climático representa una gran amenaza para el bienestar humano en general. Desde las emociones diarias hasta los problemas de salud leves a moderados y sus consecuencias extremas.
Fueron estudiados alrededor de 2 millones de personas entre 2002 y 2012. Se encontró que el cambio de temperatura mensual entre 25°C y 30°C aumenta los problemas de salud mental en 0.5%.
El aumento de 1°C en el calentamiento de 5 años se asocia con el incremento de 2% en la presencia de dificultades en la salud mental.
Sin embargo, muchas personas con síntomas de trastornos mentales no buscan tratamiento o no necesariamente cumplen con los criterios de un diagnóstico clínico.
Los factores ambientales dañan la calidad de vida en diversas áreas de riesgo social. Una mala salud mental produce costos sociales que necesitan mejorar la calidad de atención de salud mental.
De esta manera se aumenta la capacidad de recuperación, especialmente para aquellos que son más vulnerables a los impactos del cambio climático.