De acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), los tiraderos de basura a cielo abierto dañan el medio ambiente pero también la salud humana.
Por lo anterior, la SEMARNAT refiere que los rellenos sanitarios, serían la opción idónea para evitar el deterioro de los ecosistemas y pérdida de recursos naturales.
En ese sentido, la Secretaría del Medio Ambiente del Gobierno de la Ciudad de México refiere que la política en materia de residuos sólidos va encaminada hacia la prevención y minimización de los mismos a través de acciones, operaciones y procesos que permiten disminuir su cantidad en cada una de sus etapas:
- Generación
- Almacenamiento
- Recolección
- Tratamiento
- Disposición adecuada.
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Los riesgos para la salud de los tiraderos de basura
Y es que, aunque el mejor procedimiento para la disposición final de los residuos sólidos es el depósito en los rellenos sanitarios, no siempre se puede acceder al confinamiento de este tipo por ser insuficientes.
Al respecto, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), revela que en México, el 87% de los tiraderos de basura son a cielo abierto y solamente el 13% de estos son rellenos sanitarios.
Los riesgos
para la salud que estos depósitos generan, son;
- Irritación conjuntival
- Hemorragias buconasales
- Disnea
- Obstrucción respiratoria moderada
- Diarrea.
Por otro lado, cuando la basura no se recolecta de forma adecuada puede permanecer en los lugares donde se genera y disemina para así generar efectos negativos también en el medio ambiente. Por ejemplo:
- Contaminación de suelos
- Obstrucción de desagües
- Contaminación de cuerpos de agua
- Deterioro del paisaje
- Inundaciones.
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Finalmente, se deberá evitar incinerar residuos a cielo abierto, abrir nuevos tiraderos de basura a cielo abierto y por supuesto, verter residuos en la vía pública, predios baldíos, ductos de drenaje, alcantarillado, cañadas, cuerpos de agua, etc.