El asma es un padecimiento en el que se estrechan y se hinchan las vías respiratorias, por lo que se produce mayor mucosidad. Esto puede dificultar la respiración y causar tos, silbidos al respirar y falta de aire. Un ataque de asma es un empeoramiento de los síntomas de esta enfermedad.
Primero que nada, es importante que sepas que los síntomas del asma varían según la persona y que si bien la mayoría de los que tienen asma ya conoce los ataques de asma, es importante que la gente sepa las señales.
Los ataques de asma pueden ser leves o graves. Los especialistas indican que los leves son generalmente los más comunes y consisten en que las vías respiratorias se abren entre unos minutos y unas horas después del tratamiento. Los graves, por su parte, son menos comunes pero más duraderos y requieren ayuda médica de inmediato.
Ahora bien, ¿Cómo puedes saber que estás teniendo un ataque de asma? Aquí te lo contamos.
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4 señales que indicarían que estás teniendo un ataque de asma:
De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enferemedades (CDC) los ataques de asma pueden ser ocasionados por los mismos desencadenantes del asma, los cuales incluyen: ácaros de polvo, humo de tabaco, contaminación del aire, mascotas, alérgenos de las cucarachas, moho, humo de la quema de hierba o madera e infecciones como como la gripe.
"Durante un ataque de asma, los lados de las vías respiratorias en los pulmones se hinchan y las vías respiratorias se contraen. Entra y sale menos aire de los pulmones, y la mucosa que su cuerpo produce obstruye las vías respiratorias”, explican los CDC
Si sientes uno de los siguientes signos, podrías estar teniendo un ataque de asma:
En palabras de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, los síntomas típicos de un ataque de asma son:
+ Tos: que no te deja dormir y que a veces te despierta por la noche.
+ Sibilancias o silbidos al respirar: Es posible que lo escuches más cuando exhales y puede empezar como un chiflido de baja intensidad e ir aumentando.
+ Problemas respiratorios: dificultad para respirar, sensación de falta de aliento, falta de aire, respiración más rápida de lo normal
“Cuando la respiración se vuelve muy difícil, la piel de su pecho y cuello puede succionar hacia adentro”, explica la biblioteca
Opresión en el pecho
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Medlineplus recomienda llamar a los servicios médicos si la persona tiene problemas para caminar o hablar porque le cuesta respirar, está jorobado, sus labios o uñas son azules o grises y/o la persona está confundida o responde menos de lo habitual.
Recuerda nunca dar por sentado ningún síntoma o signo, ya que es importante reconocer y tratar los síntomas aunque sean leves para prevenir episodios más graves.